Un líder puede tomar esa posición por diferentes circunstancias, ya sea que fue impuesto por alguien más o los integrantes del grupo lo designaron al considerarlo el más adecuado para el puesto.
Click here to learn more
Sin importar si se nació o se aprendieron estas habilidades, Warren Bennis y Burt Nanus, pioneros en el estudio del liderazgo, observaron a 90 de los líderes más exitosos en los sectores tanto público como privado y encontraron 10 características que hacían que estos lograran cambios en la sociedad que los rodeaba:
Un claro sentido del propósito
Para generar confianza entre los integrantes del grupo, debemos saber exactamente hacia dónde va nuestro proyecto y la metodología correcta que nos va a llevar a conseguir la meta trazada.
Persistencia
Todo proyecto tiene sus altibajos, pero si tenemos una entera confianza en él y la logramos comunicar efectivamente entre nuestro equipo de trabajo, podremos salir adelante aunque se presenten adversidades en nuestro camino.
Conocimiento de uno mismo
Nadie es perfecto y si bien debemos confiar en nuestras habilidades, hay que ser lo suficientemente maduros para aceptar las áreas de oportunidad que tenemos para trabajar en ellas y que no sobresalgan de los aspectos positivos que presentamos.
Un deseo permanente de aprender
El mundo está en constante evolución y los conceptos que tenemos en este momento se pueden volver obsoletos en cuestión de días. De esta forma, mantenernos actualizados con los aspectos relacionados con nuestra empresa mediante cursos, leyendo libros especializado o buscando información confiable en la red; será la manera en que nos podemos mantener al día en las tareas que realizamos a diario.
Amor por su trabajo
Cuando una persona no le gusta lo que hace se refleja en su trato con las personas y se transmite entre su grupo de colaboradores, lo que se traduce en un trabajo mal realizado que afecta a todos. Si se disfrutan las labores realizadas día con día, no solamente evita dar una mala imagen a los clientes, sino que además crea un ambiente de trabajo positivo que motiva a seguir perteneciendo a la organización y que se desee hacer negocios con nosotros.
La habilidad de atraer a los demás
Este aspecto tiene que ver tanto con la personalidad, así como con la efectividad de transmitir nuestra visión, ser convincentes más nunca manipuladores o mentir al respecto. Hacer que las personas que trabajen con nosotros se sientan realmente una parte esencial del proyecto y no solo como herramientas para nuestro éxito individual, potenciara la motivación a unirse a nuestra causa.
Madurez emocional
Como seres humanos somos individuos que lidiamos con diferentes estímulos externos que afectan nuestro estado de ánimo positiva o negativamente. Desde conflictos familiares hasta emocionarnos en gran medida por una buena noticia, el deber de un líder es no dejar que este torbellino de emociones afecte su desempeño en el área de trabajo. Esto no quiere decir que habrá que reprimirlas sino encauzarlas y encontrar el lugar correcto para liberarlas sin afectarse a sí mismo o a los demás.
Arriesgarse
Toda innovación involucra entrar en un terreno no explorado. No se trata de echarse al vacío para encontrar oro, sino analizar las situaciones de mercado que aún no se aprovechan y diseñar una estrategia en base a este estudio para justificar que este movimiento arriesgado se está tomando con fundamentos que los llevaran al éxito.
Reusarse a creer en el fracaso
Se dice que las personas atraemos las cosas en las que pensamos, por lo cual se recomienda tener una mentalidad positiva de que se va a conseguir el objetivo colectivo trazado al comenzar con el proyecto y motivar a las personas a seguir creyendo con evidencias del progreso realizado periódicamente, además de estar al pendiente de su retroalimentación.
Conciencia de las necesidades públicas
Al final del día todas las empresas desde las locales hasta las internacionales forman parte de la comunidad y sus acciones tienen repercusiones directas en ella. La persona encargada de liderar a un equipo de trabajo debe crear conciencia dentro de la organización organizando actividades caritativas.