Los beneficios que el e-learning puede traer a las empresas son significativos. Desde ahorrar tiempo, unir los conocimientos a los objetivos del negocio, mejorar el flujo de trabajo y, en general, conseguir un óptimo desarrollo del personal.
Para esto, se debe contar con una estrategia definida y un planteamiento correcto antes de empezar con el proyecto, para asegurar que los resultados se consigan.
Algunas de las causas por la que los proyectos de E-learning no tienen el éxito que se esperaba son:
- Elaborados con un material obsoleto y los módulos de capacitación no se adaptan a las necesidades que requiere la empresa y no van de la mano con los objetivos.
- La información contenida no es creíble ni relevante, de manera que los participantes no sienten que lo que están aprendiendo se puede aplicar a su puesto.
- Se crea un curso una vez y no se hace ningún otro esfuerzo posterior. El aprendizaje no es un evento de una sola vez; debe realizarse a lo largo del tiempo y debe reforzarse y repetirse de forma continua.
Por otro lado, existen factores que influyen en el éxito de un curso de E-learning en una empresa:
Definir los objetivos del proyecto
Se debe tener claro qué pretende la empresa con la implementación del E-learning, cuál es la necesidad que se ha de resolver y cómo va a ayudar a alcanzar las metas internas.
Involucrar a los altos mandos es importante ya que en conjunto se puede obtener una visión más clara de los objetivos organizacionales.
Análisis integral de las tareas
En la etapa previa al desarrollo de los materiales para el curso, es necesario hacer un análisis de las tareas para identificar y clasificar cuáles son las que los participantes del curso deben aprender o reforzar para lograr los objetivos, con el contenido apropiado.
Para llevar a cabo este análisis primero se debe identificar las tareas específicas y conceptos asociados con base en los objetivos. Este análisis asegurará que el programa eLearning se ocupe de las tareas reales que los colaboradores deben realizar.
Definir los roles y responsabilidades del equipo de trabajo
Conseguir el apoyo y el compromiso de las personas adecuadas juega un papel clave en la implementación exitosa de un proyecto eLearning. El equipo no tiene que ser grande; Lo importante es tener claras cuáles son las personas que serán directamente responsables de la implementación y la toma de decisiones.
Un equipo debe estar compuesto por:
Un responsable del proyecto: La responsabilidad de esta persona es asegurar que el plan se implemente en el tiempo establecido, con los recursos definidos y con el alcance acordado.
Departamento de soporte técnico: Deben de ser involucrados desde el inicio y tener claro las capacidades actuales de la red e infraestructura tecnológica, así como del equipo existente en la empresa.
El equipo de TI ayudará a asegurar la preparación de hardware y software, la integración con otros sistemas, la seguridad del LMS y la escalabilidad, así como identificar problemas de ancho de banda.
Representantes administrativo y/o colaboradores de todos los grupos que se beneficiarán del proyecto: Como el personal de Recursos Humanos, Finanzas y las áreas funcionales u operacionales.
Soporte
Defina claramente en su plan cómo va a dar soporte a las personas que llevarán los cursos. Deberá existir orientación disponible para ayudar al colaborador a ejecutar con éxito el curso y alcanzar los objetivos esperados.
Definir la estrategia de Comunicación y Promoción
Ya que se tiene el conocimiento de los beneficios que tiene el curso, es importante comunicarlo de manera efectiva a los participante. Promover y promocionar es clave.
Hacer énfasis en los beneficios que recibirán sus colaboradores para lograr que se involucren en la aventura de aprendizaje.
Crear una cultura del aprendizaje
No solamente se trata de impartir los cursos y dejar todo ahí. Adicionalmente, se puede crear una comunidad en donde la gente puede conectarse y compartir lo que saben y aprenden.
Diferentes redes sociales, foros o grupos de discusión pueden convertirse en herramientas valiosas para desarrollar una experiencia de aprendizaje continúa en la empresa.
Saber medir el éxito del curso
La estrategia de implementación de un curso debe incluir la medición y el análisis de datos. Es imposible determinar si el programa produce los resultados deseados sin una evaluación adecuada.
Por ejemplo, una persona puede hacer clic en siguiente varias veces, retener la información suficiente para realizar una prueba corta al final del módulo y completar el curso en tiempo récord.
Sin embargo esto no significa que el objetivo de la empresa se consiguió.
Su enfoque debe estar en otros parámetros de referencia, tales como mayor desempeño laboral, aplicación de la capacitación, impacto general y observaciones de gerentes y colaboradores.
Todos estos elementos conforman una estrategia de E-learning integral, completamente alineada con los objetivos de la empresa y que involucra completamente a los participantes para motivarlos durante el proceso de capacitación.